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martes, 18 de octubre de 2016

YONKIS DEL PLASTICRACK

Bueno, pues ya pasó el 40k Old Style 2016 y no queda otra que contar como fue. Se hará desde el punto de vista de los meros mortales, ya que los nobles astartes tienen cosas más importantes que hacer.

Por tercera edición consecutiva se presentó el 41º de Cadia a defender el honor del Emperador y... se hizo lo que se pudo.
En esta ocasión se trataba de un torneo por equipos de 3, por lo que los defensores de Ispaal montaron una muy trasfondística alianza formada por Ángeles Oscuros, Lobos Espaciales y el Astra Militarum.
 
 
Primera batalla: los Petado(re)s norteños.
 
Los Ángeles Oscuros se enfrentaron contra su archienemigo, los Amos de la Noche. Los Lobos Espaciales se las vieron con los Eldar Oscuro, y la Guardia Imperial tuvo que batirse con la querida 3ª Compañía de Puños Imperiales. Su lista amarillo pollo estaba compuesta por cosas que hacen mucho daño a la Guardia Imperial (bueno, en realidad todo hace daño a la gloriosa), como son marines de asalto, exterminadores, marines en cápsula, land speeders, exploradores, la tradicional escuadra en rhino, devastadores, una stormraven, un par de predators y un vehículo raro que no sé cuál era.

 

En reserva quedaron los karskin fusioneros, el vendetta con el pelotón de mando, el hellhound y los veteranos en chimera que flanquearían gracias al rasgo del señor de la guerra. Los marines dejaron los exterminadores, la cápsula con una escuadra táctica y la storm raven con otra unidad.
El rival llevó la iniciativa (como siempre), cayó la maldita cápsula justo donde quería (como siempre) y se sufrió un duro castigo inicial (como siempre).
Pero las partidas de entrenamiento habían servido de algo y como la batalla consistía en capturar objetivos se llevó a cabo una maniobra impensable... "¡AVANZAR!"
Contaba con que entre los 20 guardias imperiales con 2 fusiones y a malas el Leman Russ Vanquisher, la cápsula dejaría de existir (y con ello la maldita baliza). Pero mis mágicas manos obraron el milagro y entre las absurdas tiradas de la regla bruma con alcances ridículos y los consabidos 1s, el supositorio imperial directo al ojete rival siguió en su sitio. El comandante tuvo a bien separar la escuadra táctica (creo que un error, pero bueno), con lo que los Rough Riders llevaron a cabo una gloriosa carga y acabaron con media escuadra.
En el turno 2 los exterminadores pudieron llegar por despligue rápido sin dispersión detrás de los tanques, y los dos land speeders con sus lanzallamas pesados se colocaron a placer dispuestos a achicharrar las tropas de línea.
Por primera vez en mi corta vida de general llegaron todas las reservas en el turno 2 (¡¡milagro del Emperador!!), de modo que el hellhound con su cañón quimico pudo eliminar la otra mitad de la escuadra táctica y la retaguardia comenzó a quedar algo más despejada. Además se logró disputar/controlar más objetivos, por lo que se rascaron algunos puntos.

 


Mucho daño por ambos bandos, muchas bajas y demás y al final del cuarto turno los astartes habían levantado más objetivos y superaban a la guardia en el cómputo general.
Conforme avanzaba la batalla el general de los Puños Imperiales fue contagiándose de mis tiradas y, en una disputa igualada de manitas de cerdo, la superioridad numérica de la guardia cobró ventaja. Poco a poco las armaduras amarillas fueron despareciendo merced a salvaciones de 1s y 2s ante el temible fuego de las linternas o los lanzallamas, quedando al final sólo con vida los predators, la storm raven y algún astarte mal ubicado. La guardia, en cambio, logró posicionarse para capturar más objetivos o disputar los demás.


Al final los puntos por objetivos correspondieron a un 12-8 a favor de la Guardia Imperial. Como tanto los Ángeles Oscuros como los Lobos Espaciales habían ganado sus batallas con mejor puntuación, quedamos emplazados para el segundo cruce con otro equipo ganador.
 
 
Segunda batalla: ¡Psicofármacos para todos!
 
Los rivales se presentaron con Cicatrices Blancas, Nercrones y Eldars. Ganaron la tirada para elegir emparejamiento y mesa, de modo que optaron por enfrentar a los Eldar contra nuestro jugador franquicia de Lobos Espaciales y en la mesa despejada AKA "campo de tiro" (qué maasssacreee). Los otros dos emparejamientos elegidos por nuestro equipo fueron Ángeles Oscuros contra Necrones en la mesa de combate urbano, y -contando con las armas que ignoran cobertura de la guardia- pues Astra Militarun contra Cicatrices Blancas en la mesa de escenografía media (sí...otra vez en la misma mesa...no hubo que trasladar mucho las miniaturas).
 
El ejército de Cicatrices estaba formado por la unidad pelotuda-motera con el apotecario, el bibliotecario y el señor del capítulo, un dreadnought en cápsula, dos motos de ataque, centuriones, cañón tormenta, escuadra en rhino, escuadra a pie, devastadores sin armas pesadas, exploradores y land speeder tormenta.
 
 
Una vez más (como siempre) pierdo la tirada para elegir lado y empezar, con lo cual cae lo más grande. La cápsula se planta donde quiere (como siempre), el dreadnought baja por donde le interesa (como siempre), y flamea a la infantería (como siempre). Son las cosas automáticas e infalibles que tienen los marines (porque para eso son la élite del imperio, qué demonios!). Además el bombardeo orbital es mucho mejor que el del maestro artillero imperial, pues con el "hit" no se dispersa y además es F10 FP1... afortunadamente es de un sólo uso. Pero lo cierto y verdad es que entre la cápsula, el dread y el bombardeo, el flanco derecho de la guardia quedó realmente tocado.
 
La verdad que toda la batalla fue un continuo "apretar el culete" y a aguantar a lo que se viene encima. Porque la unidad de moteros recibió fuego de todos lados, y cada turno salvaban decenas de heridas. Entre el esquivo, la chapa y el no hay dolor, era imposible bajarlos. Afortunadamente al término de la batalla estaban por debajo del 50%. Algo es algo.
El desconocimiento absoluto del cañòn tormenta también fue un duro golpe. Como eran mis dados, sé que no había "hits" en las seis caras, pero ¡qué destrozo!. En una misión deseseparada los karskin llegaron por despliegue rápido e intentaron fusionar el cañón... sin éxito. En el turno posterior llevaron a cabo una carga... pero ¡es que el tecnomarine también es un bicho de cuidao!
 
 
Los Ogretes sufrieron un fuego intenso por parte de todo lo que disparaba, con lo cual no tuvieron ni oportunidad de cargar a las motos. Una pena. Aguantaron más gracias al Comisario y al rasgo del señor de la guerra que a 12" no había que hacer chequeo por perder el 25%.
Mención especial para la historia de amor entre el rhino (gran conversión del taurox) y el chimera con los veteranos, que estuvieron toda la batalla jugando al gato y al ratón en plan "vamos a no hacernos daño", ya que ni los dos fusiones de la tripulación, ni el multilaser lograban abatir el vehículo de los cicatrices, ni el armamento astarte logró acabar con el chimera hasta el turno 6.
También fue una pena que los Rough Rider fallaran su carga por una pulgada (sólo hacía falta sumar 7 con la regla veloz!), porque obligaron a desviar disparos a las motos de ataque y quedaron a merced del enemigo al descubierto.
 
 
Al final sólo quedaron los veteranos por encima del 50% y la vendetta, mientras que el campo estaba ampliamente controlado por los Cicatrices Blancas. Menos mal que ante la perspectiva, se había intentado picotear un poco aquí y allá para reducir las unidades rivales. Al final un digno 16-4 en contra ante un gran general y magnífico jugador.
 
Desgraciadamente mis dos compañeros de equipo también perdieron sus enfrentamientos con lo cual quedamos en un tercer puesto y Psicofármacos para todos se llevaron el torneo con gran merecimiento.
 
 
Así que un millón de gracias a la organización por la currada que se pegó y lo bien que salió todo.
Gracias también a los participantes - en especial a los rivales - por unas magníficas partidas con un ambiente "Old Style" alejado del cuchillo entre los dientes en que se ha convertido este juego
¡Y enhorabuena al general de los Amos de la Noche por ese ejército Orko!
 
¡Hasta el año que viene!
 
Si el Emperador lo dispone

 
 
 







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